Redacción y fotografía : Sergio de la Rosa
La famosa banda de rock mexicana Fobia sigue festejando su 30 aniversario a lo grande, y en esta ocasión fue el turno fue de Monterrey, específicamente en el Showcenter Complex. Trajeron la noche de este jueves a presentar a la ciudad “Pastel”, su nuevo disco en vivo grabado el pasado septiembre de 2018 en el Palacio de los Deportes de la CDMX.
El concierto comenzó pasadas las 9 de la noche cuando las luces se apagaron y se escuchó la tradicional grabación de “…que a algunas mujeres les gustaría que Fernando se ocupara de ellas… ¡vete al diablo!”. Entonces el público entró en júbilo con los primeros acordes de “El diablo”.
“Bienvenidos a este concierto, bienvenidos a Pastel”, diría Leonardo de Lozanne en su primera interacción con su público.Comenzaría entonces un bloque con lo más retro de su discografía que incluía títulos como Dos Corazones, Gusanos y Plástico, entre otros.
La agrupación integrada por Leonardo de Lozanne, Paco Huidobro , Iñaki Vazquez , Javier “El Cha” Ramírez y Jay de la Cueva, en todo momento se entregaron por completo a su público, quienes se mostraron de igual forma recíprocos cantando cada una de sus canciones.
Microbito fue el primer momento top de la noche, la gente coreaba con todas sus fuerzas la letra y saltaba en los coros. La espera de tanto tiempo para el regreso de Fobia a la ciudad había valido definitivamente la pena. Esta canción acompañó a toda una generación por décadas y era momento de un poco de melancolía.
Otro momento memorable fue Revolución Sin Manos, en el cual todos con sus manos en alto acompañaron a los coros, cuando de Lozanne dijo “¡Gracias por tantos años, gracias por tanto, Monterrey!”, ante lo cual desató de nuevo la locura.
De pronto Jay de la Cueva salió de la batería y tomó la guitarra acústica, ya todos sabíamos lo que venía. Comienza el momento tierno de la noche con Hipnotízame seguida de uno de los más grandes clásicos de la banda: Vivo. El público se llenó de luces de celulares iluminando la mágica escena, haciendo sonreír a los integrantes de la banda.
El concierto terminaría pasadas las 11 de la noche, la banda agradecía mientras recorría con la mirada a su público, como grabándoselo en su memoria, como tomando una fotografía mental de esa mágica velada. Se había cumplido entonces el objetivo, se había compartido un trozo del Pastel con Monterrey.
Setlist:
