Redacción: Abraham Chávez
Luke Lorentzen es el director encargado del documental que relata la vida del día a día de la familia Ochoa. El principal oficio de la familia es el operar una ambulancia privada y pirata, tarea que desempeñan primordialmente por las noches ante la escasez de las ambulancias oficiales, 45 unidades que según el gobierno mexicano, pueden abastecer a los más de nueve millones de habitantes de la Ciudad de México.
La trama relata las veladas que parecieran interminables, la competencia entre el mismo mercado que ofrecen los servicios de ambulancias particulares, la negligencia de clínicas de dudosa procedencia, la corrupción en el sistema de seguridad, pero sobre todo la manera en que los mexicanos siempre buscan la manera de salir a flote ante cualquier necesidad.
El equipo de los Ochoa está conformado por un hijo mayor, quien lleva la tarea de paramédico, personaje que desde nuestro punto de vista logra interpretar y animar las escenas con su actitud, sus chistes y sus platicas informativas con “La Yessica”, aparentemente su novia. Por otro lado, tenemos al padre de familia, un hombre de alrededor de unos 50 años, la figura paterna en su máxima expresión, que a pesar de padecer una enfermedad cardiaca y problemas relacionados a la diabetes, siempre se mantiene al límite maniobrando y liderando la ambulancia para poder obtener el “px” mucho antes que la competencia. Otro personaje importante es el hijo, menor, un infante curioso y cautivador, el “gordito buena onda” de la historia no mayor de 14 o 15 años, quien decide ayudar a su familia por las noches en su propio “cubículo”, y en el día (de vez en cuando) asistir a clases como los otros niños de su edad.
La historia logra una de las principales razones por las cuales Luke realizo este documental, y es que sin duda alguna, te hacen sentir que estás dentro de la historia, teniendo en cuenta que la mayoría de las escenas se desarrollan dentro de la ambulancia y te hacen vivir la experiencia de que estás ahí, acompañándoles, toda una aventura por las calles de la CdMX.
Sin embargo, el punto más importante a considerar y que realmente nos alegra, es como quedan expuestas las necesidades de los habitantes que se ven involucrados en situaciones que los llevan a recurrir a los servicios de ambulancias privadas, hablando por si mismo de las carencias que se viven en la ciudad y que sabemos se viven en todo el país, también; la falta de regulación de clínicas que no son capaces de atender pacientes y que sin embargo operan porque no hay control sobre las mismas, o simplemente son invisibles ante las autoridades, pero no para los que necesitan ayuda inmediata y no la reciben por parte de las unidades clínicas del gobierno, orillándolos a exponer su vida a un precio más alto e inseguro.
El documental cuenta ya con criticas positivas y aunque 80 minutos no bastarían para mostrar por completo la realidad de la situación, si ha logrado transmitir parte de la misma, esperando que logre consciencia sobre los ciudadanos que vivimos día con día situaciones similares.
Familia de Medianoche no es una película que relata un drama o te encarrilla a una historia con un final esperado, es un inicio y una constante situación que se vive y se seguirá viviendo, lamentablemente. La cinta se ha galardonado con el premio a la mejor fotografía en Festival Sundance del año pasado, cuenta también con el Premio Mezcal por ser el mejor largometraje y asimismo Luke se posicona como el mejor director en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara y el Premio Rellumes del Festival Internacional de Cine de Gijón.
Dirección : Luke Lorentzen
Duración: 81 min.
Guion:Luke Lorentzen
Música:Los Shajatos
Fotografía: Luke Lorentzen
Productora: Coproducción México-Estados Unidos; Hedgehog Films / No Ficción
Género: Documental, Pobreza , Medicina, Drama, Social , Familia.
